17 julio, 2012 — 6:35am | Publicado por: Editorial
Es la pregunta que nos hacemos tras leer las principales conclusiones del Informe 2012 sobre Tecnología e innovación en España. Lo ha presentado hace unos días COTEC,
la Fundación para la innovación tecnológica. Su director general, Juan
Mulet, no quiso dejar pasar la oportunidad de argumentar cuál es, según
su visión de experto, el porqué de una situación cada vez más crítica
para la innovación en España. “No nos creemos que la competitividad del
país depende de tener productos competitivos, innovadores (…) de ahí que
no hay conciencia de que este sector es importante y no lo tomen en
serio”.
Sin duda, debemos dejar patente la importancia de la innovación en el tejido empresarial español pero la clave quizás esté en el cómo hacer esto. Por lo visto, no bastan las referencias de países emergentes en los que se ha apostado por una fuerte inversión en innovación y cuya economía se mantiene en niveles muy dignos o incluso crece en este contexto de crisis global. Véase el caso de Alemania, que va a aumentar este año un 5% sus recursos dedicados a I+D o Francia, que se ha comprometido a destinar unos 35.000 millones de euros a estas actividades.
¿De qué manera podrían gobierno, políticos y sociedad en general hacerse más conscientes de la importancia que tiene este sector, la innovación, para el desarrollo de un nuevo modelo productivo de la economía basado en el conocimiento? Hablamos en su momento de hasta que punto sería necesario que los medios de comunicación le hicieran un hueco específico en forma de sección a este sector: la Innovación. ¿Se conseguiría de esta forma darle más notoriedad a unas actividades que, sin lugar a dudas, son la clave de la aportación de valor en el mundo empresarial? Esto por un lado pero también están las cifras… de las que se hace eco este último informe que presenta COTEC… ¿deberían mejorarse? ¿deberían ser una prioridad para un país como España incluso en un contexto de crisis y recortes como el actual?
Informe COTEC 2012: principales conclusiones
Este informe recoge la evolución de los principales indicadores de I+D e innovación a escala nacional, por Comunidades Autónomas y su comparación internacional. También incluye la opinión de más de un centenar de expertos sobre la evolución del sistema español de innovación y, en esta última edición, un capítulo especial dedicado al capital humano para la innovación. Las conclusiones alertan sobre un grave deterioro del sistema español de innovación.
En relación a los indicadores medidos cabe destacar las siguientes conclusiones:
- Gasto español en I+D estancado: crecimiento de un 0,041% en 2010 y un -0,8% en 2009 con respecto al año anterior, frente a un crecimiento medio anual desde el año 2000 hasta el 2008 del 12%.
- Ralentización del personal que trabaja en actividades de I+D: este indicador creció en 2010 un 0,56% con respecto al año anterior y un 2,4% en 2009 frente a una media anual del 7,5% desde el año 2000 hasta el 2008.
- Disminución del gasto de las empresas en I+D: desde el máximo de 2008 cayó en 2010 en un 7% en euros corrientes y en un 8,5% en euros constantes.
- Reducción del 26% en partidas presupuestarias de I+D+i en los Presupuestos Generales del Estado para el ejercicio 2012, lo que sitúa a estas partidas de gasto por debajo de las que se dedicaron en el año 2006.
En relación a los expertos consultados nos encontramos con lo siguientes datos significativos:
- Índice sintético de opinión de Cotec para 2012 cae al 0,848, su valor histórico más bajo. Es la muestra de que existe en el país una mala valoración de las condiciones actuales y un claro pesimismo sobre su evolución futura.
- Más del 75% de los expertos consideran muy importantes la escasa dedicación de recursos financieros y humanos para la innovación en las empresas así como la falta de cultura de apoyo a la innovación en los mercados financieros y la escasa propensión a la colaboración de las empresas entre sí y entre estas y los centros de investigación.
- Sentimiento pesimista de los expertos, un 46% manifiesta opiniones de empeoramiento y sólo un 13% de mejoría.
- Dato positivo, casi la mitad de expertos consultados opina que va a mejorar la concienciación de investigadores y tecnólogos sobre la necesidad de responder a las demandas de innovación de los mercados.
En relación al capítulo específico de capital humano e innovación el informe señala las siguientes barreras que frenarían el avance hacia una economía basada en el conocimiento:
- Malos resultados del informe PISA de la OCDE.
- Alto porcentaje de universitarios frente a un bajo porcentaje de estudiantes de formación profesional.
- Escaso porcentaje de empresas españolas que proporcionan formación de algún tipo a sus empleados.
La mayoría de las conclusiones alertan sobre un grave deterioro del sistema español de innovación, el informe destaca, entre otros asuntos, el estancamiento del gasto en I+D sufrido el pasado 2011, los expertos manifiestan, en general, un futuro pesimista para la innovación en España… pero la pregunta es ¿estamos a tiempo de darle la vuelta a todo esto? ¿un cambio de pensamiento, de mentalidad podría impulsar y redirigir al sector de la innovación en nuestro país?
CIDi+Biomed
Sin duda, debemos dejar patente la importancia de la innovación en el tejido empresarial español pero la clave quizás esté en el cómo hacer esto. Por lo visto, no bastan las referencias de países emergentes en los que se ha apostado por una fuerte inversión en innovación y cuya economía se mantiene en niveles muy dignos o incluso crece en este contexto de crisis global. Véase el caso de Alemania, que va a aumentar este año un 5% sus recursos dedicados a I+D o Francia, que se ha comprometido a destinar unos 35.000 millones de euros a estas actividades.
¿De qué manera podrían gobierno, políticos y sociedad en general hacerse más conscientes de la importancia que tiene este sector, la innovación, para el desarrollo de un nuevo modelo productivo de la economía basado en el conocimiento? Hablamos en su momento de hasta que punto sería necesario que los medios de comunicación le hicieran un hueco específico en forma de sección a este sector: la Innovación. ¿Se conseguiría de esta forma darle más notoriedad a unas actividades que, sin lugar a dudas, son la clave de la aportación de valor en el mundo empresarial? Esto por un lado pero también están las cifras… de las que se hace eco este último informe que presenta COTEC… ¿deberían mejorarse? ¿deberían ser una prioridad para un país como España incluso en un contexto de crisis y recortes como el actual?
Informe COTEC 2012: principales conclusiones
Este informe recoge la evolución de los principales indicadores de I+D e innovación a escala nacional, por Comunidades Autónomas y su comparación internacional. También incluye la opinión de más de un centenar de expertos sobre la evolución del sistema español de innovación y, en esta última edición, un capítulo especial dedicado al capital humano para la innovación. Las conclusiones alertan sobre un grave deterioro del sistema español de innovación.
En relación a los indicadores medidos cabe destacar las siguientes conclusiones:
- Gasto español en I+D estancado: crecimiento de un 0,041% en 2010 y un -0,8% en 2009 con respecto al año anterior, frente a un crecimiento medio anual desde el año 2000 hasta el 2008 del 12%.
- Ralentización del personal que trabaja en actividades de I+D: este indicador creció en 2010 un 0,56% con respecto al año anterior y un 2,4% en 2009 frente a una media anual del 7,5% desde el año 2000 hasta el 2008.
- Disminución del gasto de las empresas en I+D: desde el máximo de 2008 cayó en 2010 en un 7% en euros corrientes y en un 8,5% en euros constantes.
- Reducción del 26% en partidas presupuestarias de I+D+i en los Presupuestos Generales del Estado para el ejercicio 2012, lo que sitúa a estas partidas de gasto por debajo de las que se dedicaron en el año 2006.
En relación a los expertos consultados nos encontramos con lo siguientes datos significativos:
- Índice sintético de opinión de Cotec para 2012 cae al 0,848, su valor histórico más bajo. Es la muestra de que existe en el país una mala valoración de las condiciones actuales y un claro pesimismo sobre su evolución futura.
- Más del 75% de los expertos consideran muy importantes la escasa dedicación de recursos financieros y humanos para la innovación en las empresas así como la falta de cultura de apoyo a la innovación en los mercados financieros y la escasa propensión a la colaboración de las empresas entre sí y entre estas y los centros de investigación.
- Sentimiento pesimista de los expertos, un 46% manifiesta opiniones de empeoramiento y sólo un 13% de mejoría.
- Dato positivo, casi la mitad de expertos consultados opina que va a mejorar la concienciación de investigadores y tecnólogos sobre la necesidad de responder a las demandas de innovación de los mercados.
En relación al capítulo específico de capital humano e innovación el informe señala las siguientes barreras que frenarían el avance hacia una economía basada en el conocimiento:
- Malos resultados del informe PISA de la OCDE.
- Alto porcentaje de universitarios frente a un bajo porcentaje de estudiantes de formación profesional.
- Escaso porcentaje de empresas españolas que proporcionan formación de algún tipo a sus empleados.
La mayoría de las conclusiones alertan sobre un grave deterioro del sistema español de innovación, el informe destaca, entre otros asuntos, el estancamiento del gasto en I+D sufrido el pasado 2011, los expertos manifiestan, en general, un futuro pesimista para la innovación en España… pero la pregunta es ¿estamos a tiempo de darle la vuelta a todo esto? ¿un cambio de pensamiento, de mentalidad podría impulsar y redirigir al sector de la innovación en nuestro país?
CIDi+Biomed
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